Próximo sábado 4 de Septiembre de 2021, nos ponemos de nuevo en movimiento.
En esta ocasión, dejamos por un momento la montaña, y nos vamos a la costa
llanisca para realizar una bonita Senda Costera que nos llevará desde la playa
de San Antolín a la playa del Sablón. Durante el recorrido que realizaremos,
podremos ir contemplando un sin fin de playas, todas ellas a cual más bonita.
Saldremos de Quintueles a las 8 horas, una vez hemos recogido a nuestros
amigos de Gijón, nos iremos directos hacia Posada de Llanes, donde pararemos a
desayunar. Una vez desayunado, nos aproximaremos a la playa de San Antolín y
ahí mismo damos comienzo a la ruta prevista, que consistirá en realizar una
sencilla y entretenida caminata de unos 16 kms. Antes de dar el primer paso, decidiremos
si nos paramos un momento a echarle un vistazo al Monasterio de San Antolín de
Bedón, (siglo XI-XII), teniendo en cuenta el avanzado estado de abandono del
mismo. Es incomprensible que monumentos de esta envergadura estén abandonados,
pero así es la triste realidad.
Una vez hemos llegado al punto de partida, damos comienzo a la caminata por
el camino catalogado GR E-9, una cómoda pista forestal de tierra firme con
piedra muy menuda, y muy segura de pisar, eso sí, con un poco de pendiente
durante el primer km, pero como es al principio de la caminata, y con no mucho
desnivel, segurísimo que no nos enteramos que estamos subiendo. Según vamos
ganando altura, iremos contemplando la ría, el Monasterio y la propia playa de
San Antolín.
Tras realizar el pequeño esfuerzo de la subida, muy corta y perfectamente
asumible para todos los caminantes, (hay otra pequeña pendiente un poco antes
del final de la etapa, pero totalmente intrascendente), caminaremos un buen
rato por la mencionada pista. Finalizado ese recorrido, nos desviaremos unos
metros por un estrecho camino de tierra, hasta llegar a un mirador, desde donde
podremos contemplar perfectamente desde lo alto, la playa de Torimbia (una de
las primeras playas, sino la primera, en ser declarada playa nudista en Asturias),
y playa de Toranda, ambas pertenecientes a la localidad de Niembro.
Abandonaremos el mirador para seguir avanzando unos metros cuesta abajo por
carretera, hasta llegar al pueblo de Niembro. Lo cruzamos, y seguimos avanzando
por la bahía, dejando su ensenada y playa a la izquierda, hasta acercarnos a su
famosa iglesia (imagen muy fotografiada en todos los folletos publicitarios de
las playas de Llanes). Ahí mismo, cruzaremos un puente sobre un pequeño
riachuelo, y ya a partir de ese momento, nos dirigiremos por carretera hacia la
playa de Barro. Si bien este tramo entre Niembro y la playa de Barro, lo
haremos por carretera, no debe preocuparnos, ya que tiene una buena y ancha
acera por la que podremos caminar sin problema, y en algún pequeño tramo que no
hay acera, tendremos también un ancho arcén, para ir lo suficientemente
protegidos de los coches.
Realizado este recorrido que nos ha llevado hasta la playa de Barro, y
hemos podido contemplarla, nos desviamos allí mismo a una cómoda pradería,
desde donde podremos contemplar una nueva playa, en este caso, la playa de
Sorraos. Dese ese mismo lugar, podremos ver un poco más alejada la playa de
Troenzo, por la que no pasaremos, debido a una dificultad técnica. Llegados a
ese punto (pradería), nos detendremos unos minutos, para descansar un poco,
reagruparnos, y tomarnos el Tentempié.
Tras la parada de descanso, proseguimos la marcha. Deberíamos hacerlo a
través de una senda que va por el acantilado, a la vera del mar y que nos permitiría
ver de cerca la playa de Troenzo, pero parece ser que ha caído un argayu, y
ello, dificulta mucho el paso. Como siempre, mucho promocionar desde las
Instituciones la práctica del senderismo por considerarla una actividad muy
saludable, pero cuando ocurren estas cosas (argayos o exceso de maleza que
dificulta el paso y el buen camino), nadie se ocupa de solucionar el problema.
Ello hace, que tengamos que dar unos pasos atrás y volvamos a tener que
transitar unos metros por un tramo semi-urbano, eso sí, sin peligro alguno,
hasta llegar a la Playa de Palombina perteneciente al pueblo de Celorio. Una
vez hemos alcanzado esta bonita playa, nos desviaremos unos metros, y subiremos
a una pequeña cresta a fin de poder contemplar un bonito paisaje marítimo con
la playa de Borizu al fondo.
Cuando ya nos hemos relajado unos minutos en lo alto de la cresta frente al
mar, nos acercamos de nuevo al arenal de Palombina, lo cruzaremos, y muy
rápidamente nos iremos metiendo por un camino, ramal norte del Camino de Santiago,
que nos va llevando por una muy cómoda pista hasta la playa de San Martín.
Seguimos caminando un poco más por la mencionada pista, con muy buen firme,
medio llaneando, apenas subiendo, y si acaso, también bajando un poco, hasta
llegar a la playa de Poo.
Dado que para ese día, se prevé que tengamos marea baja, evitaremos dar un
pequeño rodeo, que nos obligaría a meternos en el pueblo, cruzaremos por tanto
el riachuelo que hay en el arenal, sin necesidad probablemente, de tener que
descalzarnos.
Ya metidos en la playa, caminaremos unos metros por la misma, y en breve ya
alcanzaremos la pradería que ésta tiene en su parte alta. A través de un
estrecho camino que transcurre a lo largo de la mencionada pradería, vamos
avanzando con el mar siempre presente y muy cerca a nuestra izquierda. Después
de caminar unos metros, y dado que en todo momento estaremos en una extensa
pradería con un bonito horizonte frente a nosotros, será el momento adecuado
para buscar acomodo, pararnos a descansar y tomarnos el bocata, acompañado como
ya es habitual de los diferentes dulces/chocolates, café, etc, con lo que
algunos de nuestros caminantes, suelen deleitarnos, y como no puede ser de otra
manera, valoramos y agradecemos enormemente.
Cuando ya hemos descansado, y repuesto fuerzas, aunque hoy no habremos
quemado muchas calorías, ni habremos tenido ningún tipo de tensión acumulada,
dado la comodidad de la ruta, nos pondremos de nuevo en movimiento, para
enseguida ya meternos de lleno en el emblemático y espectacular Paseo de San
Pedro, por el que iremos caminando y disfrutando del paisaje que éste nos
ofrece durante unos minutos. A nuestra izquierda tendremos todo el mar para
nosotros, si miramos al fondo, veremos unas aguas cristalinas color turquesa,
nada envidiables a las de otras zonas de recreo marítimo, a la derecha,
podremos ver toda la Villa de Llanes, y al fondo los famosos "cubos de la
memoria". Según vamos avanzando por este reconocido Paseo, iremos también
disfrutando de sus hermosos tamarindos. Al final del paseo, alcanzaremos la
playa del Sablón, última que veremos, dando en ese momento por concluida la
caminata del día.
A continuación, iremos hacia el centro de la Villa a tomarnos el obligado
refrigerio fin de ruta, que siempre viene muy bien, y que sin duda, nos sirve
para poder comentar las anécdotas que han ido surgiendo a lo largo del camino.
Aquellos más aficionados al dulce, entre los que me encuentro, podrán tomarse
un rico helado en la heladería Revuelta, o aprovisionarse para toda la semana,
de una buena partida de pasteles en la confitería Vega. "Os
esperamos"
Próximos días 18/19 de Septiembre, tal y como está previsto, nos iremos a
Segovia, visitaremos Pedraza, Sepúlveda, La Granja de San Ildefonso, y el
Parque Natural de las Hoces del Rio Duratón.
Confirmar salida para próximo 4 de Septiembre, llamando al tfno 658473557
(Soraya), o bien, haciéndolo a través del WhatsApp del Grupo.
Fdo.- Argimiro Blanco
Club Deportivo GM Pisasenderos - Quintueles
No hay comentarios:
Publicar un comentario